SARMs
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Cada vez son más los positivos en SARMs dentro del mundo del CrossFit, y pese a ello aún existe un gran desconocimiento sobre este tipo de sustancias incluso en los propios usuarios, algo muy preocupante al considerar la seguridad y salud del atleta.
En este artículo vamos a hablar de los compuestos en boca de todos: Los SARMs.
NOTA: Este artículo no pretende bajo ningún concepto hacer apología del uso de sustancias dopantes. La información aquí expuesta no es ninguna recomendación médica. El uso de sustancias puede conllevar serios problemas para la salud además de incumplir las normativas del deporte.
¿Por qué se prohibieron los SARMs?
En primer lugar, tenemos que entender por qué se prohíbe el uso de ciertas sustancias:
La Agencia Mundial Antidopaje (WADA) publica anualmente una lista de sustancias y métodos prohibidos para los atletas, tanto durante como fuera de competición.
Es crucial destacar que en su política antidopaje, CrossFit se compromete a seguir estrictamente los criterios de la WADA y a imponer sanciones de 4 años a los atletas en caso de confirmarse un resultado positivo luego de la apelación correspondiente.
La lista de sustancias es amplia y crece cada año. Entran compuestos de naturaleza diversa que van desde la testosterona o derivados, hasta el tramadol. Este fue añadido a la lista de sustancias dopantes en 2024 debido a que actúa sobre el sistema nervioso central, inhibiendo la transmisión del dolor y en consecuencia, incrementando la tolerancia a este y por ello el rendimiento.
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La WADA incluye una sustancia en su lista solo si cumple con al menos dos de los siguientes criterios:
Los SARMs se incluyen en esta lista de sustancias prohibidas por la WADA
S1.2 OTROS AGENTES ANABOLIZANTES
Incluyen, pero no se limitan a:
Clenbuterol, moduladores selectivos del receptor de andrógeno (SARMs, p. ej. andarina, LGD4033(ligandrol), enobosarm (ostarina), RAD140, S-23 y YK-11), osilodrostat, ractopamina, zeranol y zilpaterol.
¿Cuándo se prohibieron?
En 2008, la World Anti-Doping Agency (WADA) incluyó por primera vez los SARMs en su lista de sustancias prohibidas.
¿Qué son los SARMs?
SARM proviene de las siglas en inglés de modulador selectivo del receptor androgénico (Selective androgen receptor modulator) y como su propio nombre indica, tienen una actividad androgénica reducida y una alta actividad anabólica. Son compuestos descubiertos en la mitad del siglo pasado, al principio como una modificación de la molécula de testosterona.
Los SARMs actúan de forma selectiva sobre ciertos tejidos, principalmente el músculo y el hueso.
Al usar esta técnica, se reduce la afectación de órganos como la próstata y el corazón, lo que disminuye los efectos secundarios indeseados causados por el uso de sustancias como la testosterona, como la hipertrofia de la próstata, el acné y la virilización en el caso de las mujeres.
El estudio y desarrollo de este tipo de compuestos, tenía como finalidad su implantación en el ámbito clínico.
Fármacos con este perfil, se utilizan en aquellos cuadros clínicos o patológicos en los cuales se genera un deterioro y disminución de la masa muscular y masa ósea exacerbada con los perjuicios que ello conlleva.
Sin embargo, la aprobación de sustancias para su uso en el ámbito clínico conlleva un procedimiento exhaustivo, y en el caso de los SARMs están siendo aún estudiados.
Hasta ahora, los ensayos clínicos, principalmente en roedores, no han llegado a la fase 4. En la fase 4 se estudian los efectos secundarios de un tratamiento nuevo a lo largo del tiempo.
De esta forma, a día de hoy podemos afirmar que aún no estamos seguros de los efectos a largo plazo que pueden tener los SARMs.
¿Cómo actúan?
Principalmente, los SARMs actúan uniéndose a los receptores androgénicos ubicados en el citosol de la célula, formando un complejo que se traslada al núcleo generando una respuesta al unirse al ADN.

De esta manera se activa la transcripción de genes promoviendo una respuesta como puede ser el aumento de proteínas contráctiles (actina y miosina) lo que se traduce en un incremento de la masa muscular y en consecuencia de la fuerza.
Además, algunas de estas sustancias podrían actuar aumentando los depósitos de glucógeno lo que puede ser una ventaja competitiva para los usuarios de SARMs.
¿Cuáles son los tipos de SARMs más utilizados en CrossFit?
Si analizamos los positivos en CrossFit de los últimos años, observamos que en muchos casos aparecen compuestos de esta familia.
Entre los SARMs más usados encontramos algunos como el Ostarine, el ligandrol o el RAD-140 teniendo todos ellos a nivel mecanicista una actuación similar. Además, también es muy común el empleo del GW1516, un agonista del receptor PPAR- δ, que es capaz de optimizar el consumo energético de diferentes sustratos en el músculo esquelético.
La sustancia parecía tener beneficios para la salud al reducir algunos factores de riesgo cardiovascular. Sin embargo, los ensayos fueron detenidos debido a posibles efectos cancerígenos.
¿Por qué se usan los SARMs?
Normalmente, el empleo de sustancias de esta naturaleza suele darse por dos motivos:
1. El tiempo de detección es reducido
Principalmente debido a su farmacocinética. Estos compuestos se descomponen rápidamente, lo que permite a los usuarios evitar dar positivo en los controles si saben cuándo se realizarán. Así pueden llegar a la fecha de la competición sin tener rastros de la sustancia en su cuerpo. Esta vida media en algunos casos es de entre 4-6 horas para algunos compuestos como el Andarine (Gtx-007).
Otros ampliamente utilizados como el ligandrol (LGD-4033), el Ostarine (MK-2866) o la Testolona (RAD140), tienen una vida de de entre 12-30 horas, la cual sigue siendo muy inferior a la de otro tipo de fármacos.
2. Cada año aparecen nuevas sustancias que se añaden a la lista
por tanto la utilización de fármacos o compuestos “exóticos” no incluidos en la lista de sustancias prohibidas es algo común.
Casos positivos años después del test
El dopaje, intenta ir un paso por delante de los controles, y es por ello que vemos como en algunos deportes aparecen positivos años después de la prueba.
Básicamente, esto se debe a que se van descubriendo nuevos metabolitos de sustancias que permiten re-analizar las muestras conservadas de los deportistas, lo cual ha supuesto incluso modificaciones en el pódium de las olimpiadas en algunos deportes.
Efectos secundarios de los SARMs
Como ya hemos comentado, aunque a priori los SARMs parecen ser una serie de fármacos prometedores en el ámbito clínico, no podemos garantizar su seguridad.
Además, las dosis empleadas por los atletas suelen ser muy superiores a los estudios, reportando en muchos casos efectos secundarios (estudio) similares a los del uso de testosterona o derivados:
De esta forma, uno de los principales problemas que se generan con el uso de este tipo de fármacos es la pérdida de selectividad sobre los tejidos diana y además consecuencias negativas muy graves similares a la del uso de testosterona y derivados como puede ser incluso hepatotoxicidad o estrés hepático.
Atletas de CrossFit que han dado positivo por SARMS
El caso más conocido fue el de Ricky Garard, que explicó no ser consciente de que lo que tomó estaba prohibido y simplemente siguió las recomendaciones del dependiente de una tienda de suplementos.

En este caso el Sarm detectado fue RAD-140 (testolone) y GW1516 (endurabol)
En España tenemos el caso de Oihana Moya, que dio positivo por Ostarine y GW1516 (endurabol)

Conclusión
Los SARMs son una serie de sustancias capaces de incrementar el rendimiento de los atletas, y debemos tener claro que su uso conlleva riesgos importantes para la salud del usuario.
Es importante tener en cuenta que los SARMs aún se encuentran en etapa de investigación y no han sido aprobados para su uso en el ámbito clínico. Además, su efectividad y seguridad a largo plazo no están completamente establecidas.
Por lo tanto, además de respetar la ética y moralidad del propio deporte, es importante considerar que no debemos normalizar bajo ningún concepto el uso de sustancias.